Reconozco que después de una noche al raso en plenos Picos de Europa, esta es la cara con la que hay que despertarse. Debía dolerte casi todo el cuerpo. Y después de desayunar…a seguir caminando.
Miguel Sánchez Corzo
Reconozco que después de una noche al raso en plenos Picos de Europa, esta es la cara con la que hay que despertarse. Debía dolerte casi todo el cuerpo. Y después de desayunar…a seguir caminando.
Miguel Sánchez Corzo